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La loser del 2024: Kamala Harris

La de Kamala Harris, la peor campaña demócrata en décadas

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ENERO, 2025. Si alguien afirmara hace apenas doce meses atrás que el wokismo empezaría a derrumbarse y a caer entre la vergüenza y el descrédito sería tachado, lo adivinaron, de "fascista" y de estar alucinando con un dogma que, todavía a inicios del 2024, se veía imbatible, apoyado no solo por Hollywood y las universidades sino por varias de las empresas más poderosas del mundo.

Sin embargo el triunfo de Donald Trump el pasado noviembre representó un golpe certero, propinado en el sitio idóneo, para enviar al wokismo a la lona y, el 6 de enero, Justin Trudeau, el pésimo primer ministro canadiense, anunció su renuncia. Irónicamente, ese mismo día una fuerte corriente de vientos, algunos de ellos superiores a los 160 kilómetros por hora, se avalanzaron sobre la ciudad y provocaron la peor catástrofe que esa ciudad ha sufrido en su historia.

Los fuertes vientos provocaron la caída del cableado eléctrico, fugas de gas y el fuego, alimentado por ese mismo viento, se esparció sin control y se diseminó, según un reporte de The New York Post, a una velocidad inusitada de 90 millas por hora (120 kilómetros por hora).

Una de las áreas más afectadas fue Pacific Palisades, con vista a la costa. Es una área residencial donde cada vivienda tiene un precio mínimo de dos millones de dólares y es un sitio preferido por muchas celebridades de Hollywood, entre ellas Tom Hanks y Mark "Luke Skywalker" Hamill. También se registraron fuertes incendios tierra adentro en Pasadena y en Cattle Canyon Bridge, muy cerca del parque nacional San Bernardino. Si las llamas alcanzan esa área, el siniestro podría empeorar la emergencia todavía más.

El valle que comprende el área de Los Ángeles es una zona semidesértica donde su clima frecuentemente choca con los fuertes vientos provenientes del Pacífico. Según expertos, esta inusual combinación mar-semidesierto es causa frecuente de incendios en California, con el agravante que un poco más adentro existen zonas boscosas con escasa humedad.

Contrario a lo que ahora se nos quiere hacer creer en el sentido de que las fuertes corrientes de aire en el sur de California son consecuencia del "cambio climático", este fenómeno se ha dado por décadas, sino es que siglos.

The americanthinker.com reporta que en 1925 Los Angeles Times reportó un mega incendio en Pasadena producto de los "inusitados fuertes vientos" que se abatieron por la ciudad. El siniestro fue neutralizado en poco menos de 48 horas. Otro megaindencio se registró en 1980 que igualmente afectó el área de Pacific Palisades y parte de Venice. Sin embargo cada año hay un fuego de baja a mediana intensidad en el área y todos han sido controlados en tiempo relativamente corto, incluso con agua arrojada desde helicopteros.

La tragedia más reciente se dio en el 2018 cuando un voraz incendio consecuencia del pobre mantenimiento a unas torres eléctricas provocó la muerte de 48 personas. Las torres, por cierto, son propiedad de Pacific Gas & Electric, empresa administrada por el estado de California (así es, amigos lectores: esa entidad tiene su propia CFE, con todas las prerrogativas y perjuicios que ello trae consigo).

Y si bien estos embates de la naturaleza son inevitables, ¿cómo fue entonces que tragedias similares cuando Charlie Chaplin y El Gordo y el Flaco dominaban el humorismo hollywoodense, no terminaron en una catástrofe como la que hoy experimenta California?

Bueno, entre otras cosas, por las estupidísimas políticas woke impulsadas por el gobernador Gavin Newsom y por la igualmente incompetente alcaldesa de Los Ángeles, Karen Bass, a quienes los intereses de la población importan un carajo y solo les importa promover su agenda woke. Bass se considera "no binaria", es promotora radical de las "políticas de diversidad" y, entre otras gracejadas, obligó al personal administrativo de la ciudad a emplear "lenguaje inclusivo" con sanción a quienes se niegue a hacerlo.

Y pese a que desde el viernes 2 de enero el Servicio Climático Nacional (NWS por sus siglas en inglés) advirtió sobre la posibilidad que fuertes vientos amenazaban el área de Los Ángeles los próximos días, la alcaldesa Bass tomó un avión para asistir a la toma de posesión de la primera presidente de Ghana. ¿Qué diantres tenía que estar haciendo la alcaldesa de una ciudad norteamericana en un evento así en un país extranjero?

En el aeropuerto y de regreso a Estados Unidos, un reportero británico inquirió a Bass acerca de su ausencia en California pero ésta se le quedó viendo fijamente, como si estuviera sorda. Semejante irresponsabilidad le habría valido incluso cargos penales a Bass pero, dado que es demócrata, es poco probable que se actúe legalmente en su contra.

El diario New York Post señaló que lo que llama "religión woke" hizo que la alcaldesa Bass "rasurara" 17.5 millones de dólares del presupuesto asignado al Departamento de Bomberos de Los Ángeles para canalizarlo en ayudas a la creciente población que vive en las calles de la urbe. "Originalmente (Bass) había solicitado un recorte de 23 millones de dólares, lo que refleja claramente que su agenda política está por encima de toda medida de prevención", apunta el matutino.

El gobernador Newson, quien desde hace rato rebasó holgadamente a Jerry Brown como el peor político al frente de California también es uno de los principales responsables en el pésimo manejo ante la tragedia.

En un discurso dado por el gobernador Newson en las Naciones Unidas resaltó la "emergencia que tenemos para combatir el cambio climático" y presentó como un gran logro que para el 2035 la venta de automóviles impulsados por gasolina quedará terminantemente prohibida, lo cual quizá incluye el uso de los vehículos de bomberos que utilizan combustible fósil dado que Newson "rasuró" 150 millones de dólares al presupuesto de las medidas de prevención contra incendios.

Y algo que en su momento Newson llamó "un logro", se restringió el uso del agua de un río que atraviesa una reservación nativoamericana "con el fin de proteger a especies de peces en peligro de extinción" en vez de emplearlo para las reservas acuíferas de Los Ángeles como se había hecho hasta entonces. Cuando ocurrieron los incendios, la reserva que cubre el área de Pacific Palisades, una de las más afectadas, se encontraba semivacía y fuera de servicio debido a obras de mantenimiento. De haber estado en funciones, los alcances de la tragedia habrían sido mucho menores.

La estupidez woke llegó incluso a poner al frente del Departamento de Bomberos a una mujer no-binaria simplemente para llenar las cuotas de género e inclusividad sin investigar los antecedentes. El comediante local Adam Carolla dijo que él y otros postulantes para el Departamento de Bomberos habían sido rechazados "simplemente por el hecho de tener la piel blanca". Paradójicamente, semanas después ese departamento se quejó de que "había pocos postulantes", es decir, pocos de ellos pertececían a minorías raciales.

Hubo otra medidas del gobierno angelino rayanas en la insensatez, e incluso la mala fe. Como ejemplo, se prohibió a los particulares cortar y recoger la yerba seca acumulada al lado de los caminos y carreteras para delegar esa labor exclusivamente a empleados municipales. Hace décadas la limpieza de maleza se delegaba a los prisioneros, como hemos visto en muchos programas y películas, pero aparentemente poner a cortar maleza a sujetos sentenciados es una violación a sus derechos humanos exponiéndolos al inclemente sol californiano.

¿Se aplicará la justicia contra Bass y Newsom?

La comunidad liberal asentada en el sur de California es más que numerosa y fue una de las más afectadas por los incendios; actores liberales como Anthony Hopkins y John "Pedro Picapiedra" Goodman perdieron sus propiedades. ¿Finalmente se habrán dado cuenta de que seguir votando por los políticos demócratas no es solo estúpido sino también peligroso?

Es casi un hecho que la entrega de los Óscares, esa desprestigiada ceremonia que cada vez sintoniza menos gente, será pospuesta dado que no hay ánimo de celebrar nada. ¿Cuándo se efectúe la ceremonia se exigirán cuentas a Newsom y a la alcaldes Bass?

Y con un cinismo que produce náuseas, Newson "exige respuestas" al porqué los arbotantes de la ciudad no tenían agua y los bomberos fueron auxiliados por los vecinos que les proporcionaron el líquido desde sus cisternas particulares. ¿No se da cuenta que la imbecilidad de sus medidas lo involucran directamente en la tragedia?

Hasta ahora, parece que las consecuencias podrían llevar a la renuncia de Bass aunque Newsom aún se ve seguro en su puesto. La alcaldesa probablemente será "sacrificada" y se hará lo posible por proteger a Newsom, quien hasta antes de la tragedia se veía como el más viable candidato demócrata a la presidencia. /(Y como se veía venir, ya surgieron defendsores de la incompetente funcionaria con el argumento ¿cuál otro iba a ser? de que quienes exigen cuentas a Bass son "racistas").

Como bien apuntó el gobernador de Florida Ron di Santis. de haber sido republicano, la prensa estaría exigiendo la renuncia de Newsom. Cuando el huracán Katrina golpeó el área de New Orleans, los medios liberales se abalanzaron sobre el entonces presidente George W. Bush. Lo ocurrido en Los Ángeles ha sidio muchísimo peor, agravado por la falta de previsión, el wokeísmo y la corrupción de los políticos demócratas.

Cualquiera diría que la carrera de Gavin Newsom está liquidada, y así debería de ser en un país donde impera el sentido común, pero cuando hablamos de Estados Unidos, ese no es el caso. Se trata de una sociedad profundamente dividida y desorientada en sus valores y donde es más importante para millones de norteamericanos una mediocre canción de Beyoncé que la reputación de un político que aspira a un puesto público. Por esa (patética) razón, es prematuro enviar al fondo del WC a Gavin Newsom, sitio que lo reclama desde hace buen rato.



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